Oliver Wyman y el Foro Económico Mundial han publicado la 17ª edición del Global Risk Report.
Oliver Wyman y el Foro Económico Mundial han publicado la 17ª edición del Global Risk Report, que sitúa al cambio climático, concretamente a la falta de acción climática, los efectos adversos del calentamiento global y la progresiva pérdida de biodiversidad como la principal preocupación de la población global a corto, medio y largo plazo.
Además, y a consecuencia de la crisis del Covid-19, los asuntos relacionados con la desigualdad social toman relevancia dentro de las preocupaciones de la sociedad global, que posiciona la erosión de la cohesión social; la crisis de las formas de subsistencia y el deterioro generalizado de la salud mental como tres de las grandes preocupaciones a corto plazo, que han empeorado su situación en los últimos dos años.
Así, en un entorno de preocupación generalizada, los expertos encuestados consideran que el periodo de los próximos tres años estará marcado por la volatilidad, la incertidumbre y una recuperación desigual tras la pandemia que generará una gran brecha entre ‘ganadores’ y ‘perdedores’ de la crisis, ahondando las desigualdades existentes antes de la llegada del Covid.
Además, el informe detecta la ciberseguridad, la competencia en el espacio, la transición climática desordenada o las presiones migratorias como otras de las grandes preocupaciones globales que entran en esta última edición y que, tal y como señalan los autores del estudio, requieren de una coordinación global para ser gestionadas de manera exitosa.
La población española, por su parte, centra su preocupación en el ámbito económico y apunta al desempleo; el estancamiento económico; el fracaso de la acción climática y la fractura en las relaciones interestatales como las principales amenazas en este 2022.
El cambio climático, la amenaza más preocupante
Si bien para los próximos cinco años los riesgos climáticos conviven en nivel de preocupación con los de carácter social, desde un punto de vista más largoplacista, en un horizonte de diez años, el cambio climático protagoniza por completo el ránking de las principales preocupaciones de la población global. De este modo, los riesgos medioambientales se perciben como las cinco amenazas más críticas a largo plazo para el mundo, así como las más potencialmente dañinas para las personas y el planeta, con el fracaso de la acción climática, los fenómenos meteorológicos extremos y la pérdida de biodiversidad como los tres riesgos de mayor gravedad.
En esta línea, Pepa Chiarri, Executive Director, Climate & Sustainability de Oliver Wyman Iberia, destaca que los resultados del informe “ponen de manifiesto que la sociedad sigue demandando que se continúe trabajando en transitar hacia una economía más verde y más sostenible y que no se pierda el foco en desarrollar nuevas acciones destinadas a frenar el deterioro causado en el planeta”; y añade: “si bien no es demasiado tarde para que gobiernos y empresas actúen para mitigar este tipo de riesgos, sí es necesario un compromiso sólido y urgente para una transición hacia un modelo de producción y consumo más ecológico e inclusivo”.
Un futuro marcado por la incertidumbre generalizada
Esta edición del informe dibuja un panorama marcado por la incertidumbre generalizada en torno al futuro entre los expertos encuestados, de los que tan solo un 16% mantiene una visión positiva u optimista del escenario global de los próximos tres años. En este sentido, de entre los optimistas, tan solo un 11% considera que la recuperación mundial se acelerará y más del 80% del total de encuestados dice encontrarse preocupado o muy preocupado ante las actuales perspectivas de futuro.
Ante estas circunstancias, el informe representa una clara muestra de los temas que moldearán la agenda global en los próximos años, instando a los líderes globales a la coordinación de políticas para la gestión de riesgos y a la adopción de una respuesta coordinada y de carácter multisectorial para abordar una serie de riesgos comunes que amenazan al mundo en este tercer año de pandemia.



