Hay una parte de Europa que se encuentra a la vanguardia de las energías renovables. Países como Suecia, Dinamarca, Noruega, iniciativas alemanas, holandesas, españolas recorren el mundo por su compromiso con la ecología. Por la propagación cultural de una conducta sustentable, dirigida desde las autoridades y aplicada por la población. Escocia es otra nación que integra ese grupo de referentes de la conciencia sustentable. Adquirió su fama por haber generado más de la mitad de su electricidad con energías limpias.
La noticia es alentadora. Las estadísticas suministradas por el Departamento de Energía y Cambio Climático del Reino Unido muestran que el 57,7% del consumo de electricidad escocés provino desde las renovables en 2015. De tal manera, se ha cumplido el objetivo inicial que estimaba un empleo energético sustentable del 50% y hasta superado por un 7,7 por ciento. Las estadísticas, de todos modos, fueron publicadas por el Partido Nacional Escocés con un neto propósito político: alentar a la población a seguir estimulando las energías renovables en caso de ser reelegidos en las próximas elecciones de mayo.
El nuevo plan planteado ahora por el gobierno de Escocia es alcanzar una producción eléctrica íntegramente renovable para 2020. Que en menos de cuatro años todo el suministro de electricidad nazca desde las energías limpias logrando un crecimiento exponencial en los próximos semestres. Porque si bien es un país con una población de apenas cinco millones de habitantes, más de un cuarto de la electricidad renovable generada en el Reino Unido proviene de las centrales energéticas escocesas.
Los logros ecológicos que ostenta Escocia comparten la misma línea que el objetivo alcanzado en 2015 y difundido recientemente. El año pasado, había conseguido proporcionar el 97% de la electricidad consumida por los hogares gracias a los resultados de la energía eólica. En el último noviembre se aprobó la construcción del mayor parque eólico marítimo del mundo. Una energía alternativa bastante económica basada en el recurso mareomotriz, que con una potencia de 135 gigavatios por hora permitirá abastecer a más de 20 mil casas.
Estos comportamientos amigables con el ambiente la postulan a Escocia como una de las naciones más comprometidas a desarrollar energías renovables que comulguen con el propósito mundial de responder a los efectos del cambio climático con una disminución efectiva de la emisión de gases invernadero. Un ejemplo de cómo con decisión, valor, voluntad y una conciencia social activa se pueden conseguir resultados sustentables para liberar a una nación de los combustibles fósiles. El camino hacia un mundo mejor se nutre de estas consignas.



