En el marco del programa “Para Ver Mejor”, 50 niños salteños recibieron anteojos. El programa es desarrollado por el área de Responsabilidad Social Empresaria (RSE) de la Municipalidad, junto a Vicente Nazr, de la óptica San Jorge.
“Cada familia cuenta con una historia de lucha y poder aportar para que sus hijos puedan ver mejor es gratificante”, señaló Nazr durante el acto. Desde que el programa comenzó a desarrollarse en la ciudad, 2.050 chicos de escasos recursos pudieron acceder a anteojos que de otro modo les serían inaccesibles.
“Nos sentimos orgullosos, con una satisfacción que llena el alma. Poder llevar adelante este programa es un trabajo plenamente solidario y que esperamos continuar hasta diciembre. Todavía tenemos alrededor de 250 anteojos más por entregar”, explicó Marcela Llanos, directora general de RSE de la Municipalidad.
Por su parte, Celeste Civalero, de Din Don, expresó: “Para nosotros, como empresa familiar, es muy grato poder aportar con estos regalos; venimos a sumar la parte divertida y de agasajo a los chicos en lo que es el mes del niño”.
Aportes que cambian la vida
Durante el acto de entrega de anteojos, muchas familias expresaron su agradecimiento al municipio y a Vicente Nazr. Uno de los relatos emotivos fue el de Paula, una madre de dos hijos quien tuvo que atravesar el reciente fallecimiento de su esposo. Nicole, su hija mayor de 12 años, fue una de las beneficiadas con los anteojos que se entregaron esta mañana.
“Hoy mi hija recibió más que unos anteojos, recibió una gran ayuda del municipio y a la vez un regalo de su papá desde el cielo”, expresó emocionada la mujer.
Paula explicó que su esposo trabajó hasta último momento para poder juntar el dinero para comprar los anteojos de Nicole, pero el hombre falleció y Paula no pudo conseguir el dinero. “A los pocos días de que murió mi esposo, estábamos viendo la televisión con los chicos y vimos que la directora de RSE (Marcela Llanos), explicaba sobre la entrega de anteojos. Entonces junté los papeles y me presenté en la Municipalidad”, relató la mujer.
Al tiempo que agregó: “Mi hija y yo estamos muy agradecidas, el recibimiento y el trámite fue rápido, y la óptica ni preguntó el costo de los anteojos, no escatimó en gastos y hasta le permitió a mi hija elegir el modelo”.
“Ahora Nicole mejorará en la escuela porque al no poder ver bien, su desempeño estaba bajando, además ya no tendrá conflictos con sus compañeros para que la dejen sentar adelante”, concluyó.



